ELA, CC OO y UGT advierten que los «retoques» de la reforma laboral aprobados el viernes «facilitan aún más los despidos»
Los sindicatos ELA, CC OO y UGT coincidieron ayer en criticar los «retoques técnicos» de la reforma laboral que el Gobierno aprobó el viernes. Todos percibieron una «maniobra» para facilitar «aún más» los despidos colectivos y censuraron con especial dureza el punto que reduce las causas de nulidad para los EREs. En opinión de los sindicatos, supone un «regalo» para los empresarios después de que muchas sentencias judiciales hayan anulado varios despidos colectivos, en algunos casos por defectos formales como la ausencia de voluntad negociadora.
La reacción más contundente vino de parte de ELA, que denunció que tras «eufemismos» como «mejoras técnicas» o intentos de «evitar la litigiosidad y la saturación de los juzgados», se «pretende acentuar la unilateralidad empresarial en torno a los despidos, de manera que la posibilidad de una intervención judicial quede reducida a la mínima expresión». El sindicato afirma que «se cumple» así la voluntad de la patronal cuando señala que «la función de los jueces no puede ser la de enmendar la voluntad empresarial».
La central nacionalista también denuncia que la obligación de que un ERE se negocie en una sola mesa aunque afecte a varios centros de trabajo busca «hurtar la intervención sindical en aquellos ámbitos como Euskadi donde los sindicatos podamos ser hostiles a los planes de destrucción de empleo».
CC OO también lamentó que «con la excusa de hacer ajustes menores, el Gobierno ha dado una nueva y profunda vuelta de tuerca a la reforma laboral» facilitando «aún más» el despido «por dos vías: primando la decisión empresarial sobre la autoridad administrativa y la tutela judicial de los despidos; y limitando la representación y el control sindical. En su opinión, el nuevo decreto otorga además a las multinacionales una mejora adicional: no tendrán que presentar cuentas consolidadas del grupo para respaldar un despido colectivo, salvo que tenga la matriz en España.
A ese respecto, UGT considera que se trata de una medida que «trata de ofrecer a las multinacionales incentivos para su implantación en España, a cambio de facultarlas para despedir a su antojo».